Aventura en el Gran Norte

Ya queda menos, ocho dias y bajando. El tiempo a pasado rápido, contratamos la cacería este año en Ficaar y para cuando te quieres dar cuenta, ya estas cerrando las maletas y repasando listas.

Os cuento, el día 20 de este mes, el jefe y yo volamos a Fort Saint John, en British Columbia, provincia de Canadá, para coger una avioneta que nos dejara en algun lago de las Rocky Mountains. Allí iremos a caballo hasta el campamento principal, para pasar diez días de caza en el paraíso. Sin coches, sin electricidad y lo que más impresiona de todo, miles de hectáreas de monte sin más gente. Los guías, los caballos y nosotros, nadie más.

Es mi segundo intento a por el Alce despues de ni haberlos visto apenas en el Yukon. La caceria es similar, bastante mas al sur, donde se supone que habra una densidad de animales mayor. Pasaremos los días buscando tambien Wapitis, Cabras y Ciervos Mula, y tal vez tengamos la fortuna de ver algún lobo o wolverine. Veremos lo que nos encontramos una vez allí, ha estas cacerías hay que ir con la mente abierta. En esas fechas estamos en pleno celo del Alce y de Wapiti, por lo que puede ser un espectáculo. No se si cazaremos algo, pero solo por estar allí el viaje merece la pena. Las montañas y bosques del gran norte, los caballos, las tiendas y el arco, son mis ingredientes favoritos.




ENTRENAMIENTO

Para muchos la cacería empieza ahora, pero para mi empezó hace mas de un mes, cuando decidí que haría todo lo que estuviese de mi parte para lograr mis objetivos. Puede que el tiempo se ponga en nuestra contra, que no veamos caza, que le guía sea un imbécil, que tengamos un accidente, que el terreno sea muy complicado, mil cosas se pueden poner de cara de las que no tenemos control, pero lo cazadores con arco lo que no nos podemos es permitir el lujo de dejar mas factores al aire, por lo que si no puedo conseguirlo, que no sea por que no llegué.

Así que todos los días toca ponerse en forma. Un día si, un día no, corro entre 7 a 12 kilometros, y el dia de descanso lo completo con 45 minutos de bici. Todo esto acompañado de subir escaleras con la mochila bien cargada o ejercicios variados. Y la verdad es que se nota, mi capacidad pulmonar ha aumentado un barbaridad, y ahora si tengo que subir un pequeño repecho, se que cuando llegue arriba podré tensar el arco sin estar echando el pulmón por la boca. Son estas pequeñas cosas las que pueden marcar la diferencia.

Aparte de llegar fuerte, hay que conseguir que el tiro cuente, y para eso lo mejor es tirar y tirar. Sobretodo variar, unas veces sentado, otras de pie, tirar hacia arriba, hacia abajo, esquivando ramas, combinándolo con pequeñas carreras y a todo tipo de distancias. No se sabe muy bien porqué, pero cuanto más entrenas, más suerte tienes.


EQUIPO

A Canadá me llevo mi viejo amigo de batalla, un Mathews Switchback que me ha traído muchas alegrías. Puesto a 70 libras y con una flecha de 500 grains, creo que si consigo librar la paleta, no tendré problemas para alcanzar ambos pulmones del alce. Puntas como siempre, llevo un poco de todo, pero principalmente las Muzzy MX-3 y las Nap Hellrazor. Mira truglo con 4 pines, 20, 30, 40, 50. Reposaflechas de caída ripcord y estabilizador doinker multirod de 7 pulgadas. Repuestos de todo, que junto a una pequeña prensa portátil, espero que me saquen del mal trago si le pasa algo al arco.

He cambiado de quiver, he sustituido el fijo de mathews por un alpine soft lock de siete flechas. Un quiver desmontable me da una gran versatilidad, y se que no tendré problemas al meter el arco en la scabbard del caballo o tal vez cuando este arriba y el aire sople fuerte, tener el carcaj con todas las flechas en el cuerpo del arco es un estorbo, hace que se te mueva un montón el arco. Así que siempre me lo puedo quitar, y enganchármelo en el cinturón en un accesorio que venden de la misma marca, o si no, también engancharlo en mi mochila. Creo que el cambio ha sido acertado.

Prismaticos 10x42 Zeiss y un Spotting Scope nos ayudaran a localizar los animales, una buena óptica es importantísima, sobretodo en estos lugares de baja densidad en los que dedicas mucho tiempo a localizar caza, y en los que puedes perder el día entero entrando a un animal muy alejado, y perder toda la mañana para llegar y darte cuenta que no es lo que buscabas, pues como que no.

Mochila llevo una blackcreek modelo canadian, que lo mismo puedo reducirla para llevarla sin problemas como equipaje de mano, que ayudar a bajar carne al campamento. Creo que es una mochila idónea para un viaje de estos, en los que te pasas todo el día fuera del campamento, o incluso puede que pases un par de dias en un campamento volante. Saco, esterilla, botiquín, botas de montaña y de agua. Un par de ropas de agua, una de ellas en el equipaje de mano, una de las cosas mas importantes. Ropa para aguantar todo tipo de clima, ya que pasaremos de temperaturas agradables bajo el sol, a dias frios probablemente con nieve. Cámaras de videos, baterías, linternas, cámara de fotos, etc… Meter todo esto en una maleta no es fácil, hay que pensar muy bien que se va ha utilizar y que no.

LA SUERTE ESTA ECHADA

Al escribir esto me pasan muchas cosas por la cabeza, los nervios empiezan a notarse, cada vez tengo mas ganas de llegar a Fort Saint John y ver como aparecen por la cinta las maletas con todo el equipaje. Es probablemente el viaje de mi vida, y espero estar a la altura y no desaprovecharlo. Lo que tambien tengo claro es que voy a disfrutar, nada de agobios, lo que tenga que pasar pasara y a amoldarse.

Crucemos los dedos, ojala haya suerte. Las cartas estan repartidas, ahora solo hay que saber jugarlas.